Colonia: historia en pocas manzanas

A orillas del Río de la Plata y a unos 45 km en línea recta de Buenos Aires se encuentra Colonia. Una pequeña ciudad uruguaya que recoge a un gran número de turistas. Su cercanía con la capital argentina y sus atractivos históricos la convierten en un destino interesante para cualquier viajero.

Con un billete en buquebus y un taxi hasta Puerto Madero, cualquiera puede ir hasta Colonia y volver en el mismo día. A elegir y pagar, el trayecto dura una o tres horas. En clase turista o primera, el viajero tendrá a su disposición un bar de desayuno y aperitivos, una tienda y diferentes máquinas recreativas para hacer más ameno el recorrido por el Río de la Plata. Si todo eso no es suficiente, aún se puede ver un show musical en el salón central odescansar en la butaca mientras se lee el periódico.
La llegada a Colonia es el momento idóneo para subir a cubierta y tomar las primeras fotografías. Si el tiempo acompaña, pueden observarse las islas de San Gabriel y Farallón. Es aconsejable centrarse en ellas más que en el poco lúcido puerto.
Tras un laberíntico camino de bajada al puerto, el turista tendrá que elegir entre caminar solo o comprar uno de los city tour disponibles.

City Tour

La Puerta de la Ciudadela nos lleva al casco histórico de Colonia

Para no defraudar a la verdadera naturaleza guiri, el city tour se compone de un paseo en autobús bordeando la costa hasta llegar a la Plaza de toros y un recorrido a pie por el centro histórico de la ciudad. Todo acompañado de la voz de un adorable guía autóctono.
Quizás el pasajero puede tener una mala primera imagen de la ciudad tras el puerto y las primeras calles que cruzará el autobús. Sin embargo, esperar tiene su recompensa. Pronto podrá ver el verdadero encanto de la ciudad y comprenderá por qué la UNESCO la declaró patrimonio de la humanidad en 1995.
El viaje comienza con varios sitios abandonados y termina en uno de ellos (la Plaza de Toros). Desde antiguas fábricas de coca-cola hasta viejos estadios deportivos pasando por bustos de ex presidentes y escuelas donadas a la ciudad. Tras dejar a laizquierda una nueva escultura al fundador Manuel de Lobo llegaremos a la Plaza de Toros. Con solo dos temporadas en activo, su construcción en cemento y acero rojo importado de Inglaterra es digna de retratar.
Ya en el centro de la ciudad y después de acordar el horario de regreso, hay que dejarse ver como un auténtico turista recorriendo las calles de Colonia en grupo liderados por un coloniense.
El recorrido a pie no dura apenas una hora y comienza en la Puerta de la Ciudadela, cercana a la oficina de turismo. Inaugurada en el período del gobernador portugués Vasconcellos, sus pilares de piedra, muros y pavimento la convierten en la entrada al centro histórico.
Atravesando el puente tendido sobre el foso, el guía invita a observar uno de los cañones de mediados del S.XV instalados en la muralla.
Una vez dentro, el viajero empezará a amortizar su pasaje al disfrutar de las calles de arquitectura portuguesa y española. Un regreso al pasado plasmado en los adoquines y puertas que se mantienen tal y como se crearon. Esta mezcla histórica es propia de los conflictos entre los imperios español y portugués en esta zona que acabó bautizándose como “Manzana de la Discordia” o ciudad de “La pluma y de la espada”.
Degustar la fruta es sencillo. Sólo basta con caminar hasta la Calle de los Suspiros. Pavimentada con piedras en forma de cuña, se caracteriza por los colores vivos de sus casas. Propia de la arquitectura portuguesa, esta calle convive con otras de casas de

La Calle de los Suspiros presenta una típica arquitectura portuguesa

ladrillo y techos de azotea típicos de la española.
Tras disfrutar de las diferentes edificaciones, se necesitaran tres pesos argentinos para subir a lo alto del Faro. Situado en las ruinas del Convento de San Francisco Javier no es apto para aquellos con tendencia al mareo. Si eso no es problema, subir su escalera de caracol debe ser la meta de todo buen fotógrafo.
Siguiendo la ruta, se atravesará la Plaza de Armas para llegar a la Basílica del Santísimo Sacramento. Reconstruida en varias ocasiones, se la considera la más antigua de Uruguay. Su majestuosidad da al viajante una sensación de tranquilidad y sosiego ideal para el fin del recorrido.

Tiempo Libre

Con hambre, el aventurero despedirá a su guía justo a tiempo para descubrir otro de los encantos de Colonia: el chivito. Hecho de filete de ternera y recubierto con queso y huevo, es un plato que no falta en las cartas de los restaurantes repartidos por el centro. Si bien no es ninguna ganga (alrededor de los 200 pesos para dos personas), merece la pena reponer fuerzas para el tramo final.
En las dos horas que restan, una de las últimas visitas responderá la necesidad de los adictos a la artesanía y los suvenires. Al

El mercado de artesanía es un buen lugar para comprar un souvenir

lado de la playa, una plaza contiene una variedad de puestos de ropa, artesanía y recuerdos para los visitantes tanto en moneda uruguaya como argentina y a precios módicos.
Con regalos, fotografías y el estómago lleno llega la hora de recogerse. Un autobús recoge a los turistas y los lleva de nuevo al buquebus. El guía se despedirá y les agradecerá que hayan saboreado por primera vez “la Manzana de la Discordia”.

SUMARIO – COLONIA (URUGUAY)

Viaje realizado el 28 de agosto a la ciudad de Colonia en Uruguay. Durante un día realicé un recorrido turístico en autobús por la costa y alrededores y a pie por el centro histórico. Todo ello acompañado de una guía y sus explicaciones.

La empresa contratada fue buquebus. Toda la información del paquete turístico y sus distintos trayectos pueden verse en: http://www.buquebus.com

El día del niño aumenta un 13 % las ventas con respecto a 2009

Las perspectivas previstas para el día del niño se cumplieron ayer con una subida de un 12,8 por ciento según informó a la prensa la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came).

La afluencia de gente en comercios en la semana previa al día del niño, creó expectativas en los empresarios de la industria juguetera. Las cifras rondaban el 20 % de subida junto con una subida de precios general.

La electrónica y computación han ganado puestos a los juguetes más tradicionales. Sin embargo, la publicidad de las grandes películas de animación sigue dando sus frutos. «Lo más vendido es de Toy Story 3 y Shrek 4», afirmaba Luz María, empleada de la cadena El mundo del juguete.

Respecto al precio, rondó cifras entre 50 y 300 pesos. «La gente compra menos pero más caro», mientras sigue llenando las principales jugueterías de la ciudad. La afluencia de público alcanzo su clímax el sábado por la mañana mezclándose con las celebraciones y resto de actos de celebración.

«Vengo a hacer una última compra pero ya no queda nada», relataba Claudia, de 36 años de edad y madre de 2 hijos. «Los chicos viven esto como un día especial pero me parece muy comercial». Es la impresión general en un ambiente de crisis económica que pareció olvidar las compras de este día.

El día del niño muestra la solidaridad argentina

Las actividades comerciales del día del niño no deslucieron el apoyo a los más necesitados. Durante todo el día, se celebraron diversos actos a favor de los chicos que menos tienen. Desde caravanas solidarias a iniciativas del gobierno pasando por programas televisivos de récord.

Capital Federal fue una de las más activas en cuanto a la celebración. Durante toda la mañana, la avenida 9 de julio abarcó actividades culturales, deportivas y recreativas. Personalidades del país apoyaron la iniciativa con su presencia. Entro otros, destacaron deportistas como Gastón Gaudio o Hernán Senillosa y futbolistas como Walter Pico y Luis Alberto Carranza.

El público asistente pudo disfrutar de deportes y actividades lúdicas a cargo de asociaciones metropolitanas de Taekwon-do, Karate o Capoeira. La opinión fue generalizada a favor: «Los chicos disfrutan de un día deportivo y saludable y a ellos les encanta» comentaba uno de los padres asistentes. La preferencia de los más pequeños tendió al fútbol y sus talleres: «Prefiero el fútbol porque quiero ser futbolista» aseguraba Juan de 10 años.

Para aquellos que no pudieron recibir regalo, la ciudad recogió diversas iniciativas solidarias. Una de la más destacable por su historia y funcionamiento está a cargo de Metrovías bajo el título 2 viajes por un alimento. La propuesta vigente desde 2002 pretende conseguir productos no perecederos (leche en polvo, arroz, fideos, harina, aceite, azúcar, polenta y vegetales enlatados) a cambio de 2 viajes en Subte.

Aunque esta no es la única unión solidaria entre transporte y niños. La Caravana Solidaria tiene como objetivo llevar juguetes a varios hospitales. Los moteros convocan a sus compatriotas a unirse con 2 juguetes nuevos para aumentar la solidaridad del momento. Este año los afortunados fueron los niños de los hospitales Gutiérrez y Garraban, formando parte de un recorrido que duró de 10:00 a 13:00 horas.

En un ámbito nacional, Unicef colaboró con los niños creando el evento Un Sol para los chicos. Una maratón solidaria televisada a la que se podía asistir comprando las entradas en las taquillas de Luna Park (avenida Corrientes). Música en vivo y espectáculos redondearon el día con famosos como Verón u Ortega que se unieron a la fiesta. El evento marcó un exitoso record al recaudar 8.161.642 pesos. Alrededor de 2 millones más que el año pasado.

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